Sesiones Smash Cake

Un primer cumpleaños inolvidable, lleno de risas, colores y dulzura.

La sesión Smash Cake es una forma única, divertida y original de celebrar el primer año de tu bebé. Una experiencia pensada para capturar su personalidad, sus expresiones más espontáneas y esa mezcla perfecta entre curiosidad y ternura que solo se da en esta etapa.

Empezamos con algunas fotos limpias, donde tu peque está en un entorno cuidado y lleno de detalles. Luego, llega el gran momento: una tarta segura, casera y adaptada para bebés, lista para ser explorada (¡y destrozada!) con manos, pies y muchas risas. Y, si lo deseas, finalizamos con un pequeño baño de burbujas para cerrar la sesión con imágenes aún más adorables.

Todos los decorados son personalizados, cuidando cada detalle para que el set combine con vuestros gustos, el estilo del bebé y la tarta. Los colores, accesorios y atrezzo están pensados para realzar, no distraer, permitiendo que tu peque sea el verdadero protagonista.

Estas sesiones no son solo una sesión de fotos: son un recuerdo para toda la vida, un regalo visual que marcará el cierre de su primer gran año.

¿Tienes una idea especial en mente? Escríbeme y la haremos realidad!

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como es una sesión smash cake?

Una sesión Smash Cake es una experiencia pensada para celebrar el primer cumpleaños de tu bebé de una forma divertida, tierna y absolutamente inolvidable. No se trata solo de hacer fotos bonitas, sino de crear recuerdos llenos de emoción, risas y libertad. Dependiendo del pack que escojáis la sesión consta de tres partes principales:

Retratos previos: Comenzamos con unas fotos más limpias del bebé solo, con una ropita especial o algún detalle que queráis conservar como recuerdo. Este momento es perfecto para captar su expresión pura y su mirada curiosa. También haremos alguna foto familiar.

Smash Cake: Aquí empieza la fiesta. Presentamos la tarta y dejamos que tu peque explore, toque, pruebe… ¡y destroce! No hay reglas, solo libertad, diversión y muchas risas. Cada bebé reacciona diferente, y eso es parte de la magia.

Smash Bath: Para terminar, un baño de espuma o leche en una pequeña bañera. Es relajante, fotogénico y ayuda a que el bebé se sienta cómodo y termine la experiencia de forma suave. Durante toda la sesión, acompaño el ritmo de tu bebé, respetando sus tiempos y su estado de ánimo, para que tanto él como vosotros estéis tranquilos y disfrutéis. Nada de estrés ni prisas! La decoración, colores y estilo de la sesión se personalizan según tus gustos y preferencias, para que todo tenga sentido con vuestro estilo y podáis conservarlo como una cápsula del tiempo de este primer gran año.

cuando reservar?

Lo ideal es reservar la sesión cuando tu bebé tenga entre 10 y 11 meses, para que podamos hacer la sesión con tiempo y que tengas las fotos listas antes de su primer cumpleaños. Esto nos da margen para elegir el decorado, reservar la tarta con la pastelera y planificar cada detalle con mimo. Las fechas se llenan con rapidez, especialmente en ciertas temporadas, por lo que te recomiendo contactarme al menos con 1 o 2 meses de antelación. Así aseguramos que puedas celebrar esta etapa tan emocionante sin prisas y con todo cuidado.